miércoles, marzo 24, 2010

Los mejores recuerdos de tu vida en la mía



Pasan los años más rápido de lo que pensamos, y al mirar mi blog me doy cuenta que he mantenido este espacio por casi 4 años, y que en cada año celebro este día a la distancia... y al releer lo que alguna vez dije para ahondar un Feliz Cumpleaños, me es difícil escribir sin repetir las ideas, por lo cual en esta ocasión decidí recordar.
Aquí van algunos de los mejores recuerdos que tengo junto a mi hermana, como una forma de decirle una vez más feliz cumpleaños, ah! si, y que la quiero y que la extraño.




- ¿Una muñeca para Navidad? la emoción de esperar ese día 25 por la mañana y ver que en nuestras camas había un regalo... una muñeca para cada una, siempre parecidas pero con el pelo de diferente color, o con ropas distintas. Claro que eso duró unos años, y luego nunca más recibimos en navidad muñecas, fueron reemplazadas por los peluches, y es que ya estábamos "grandes". Peluches que llegan cada 25 de diciembre hasta el día de hoy.

- La soñada colchoneta bronson... seguro que el papi todavía tiene la libreta donde anotaba la plata que juntábamos para comprarla, me acuerdo que llegamos a tener como $500, claro que en esa libreta no quedaba registro de los egresos, solo los ingresos. Menos mal porque o sino quedaría al descubierto que el papi nos engañaba, porque por cada 100 de ahorros le pedíamos 200... que ganas locas teníamos de tener una de esas colchonetas en la casa, pero el no tenerla no nos impedía andar haciendo volteretas e invertidas en la galería.

- Unos ricos chocolates en el cajón de la Pochis. Chocolates que ella tenía que vender en su colegio, pero uno o dos no se notaban, ¿cierto? dos o tres, o toda la caja, ella pensaría que los había vendido... nunca nos descubrieron, seguramente la pocha pensaba que el papi se los comía, como después el terminaba pagándolos...

- ¿Algún coro para cantar juntas? A ver, cual fue el primer coro en que cantamos juntas... si, en la capilla. de ahí al coro de básica en el colegio, ¿te acuerdas? amico mío, non temere piú la notte. Y luego el coro que tanto nos marcó a ambas, como a muchas que pasamos por ahí. Si pienso en ello se vienen tantos viajes, tantas canciones... la gran mayoría juntas. Y si de viajes con el coro se trata, se me viene un momento muy especial a la mente, ese viaje a Chiloé, en medio de la carretera luego de el cuasi accidente, y que bajamos del bus y llorando nos abrazamos... ¿¿recuerdas?? sentir que estábamos vivas y que el Padre Guillermo nos había salvado...

- Coxis eternamente doliente, jajajaja. La típica frase, cuidado, no vez que me duele el coxis?? y la típica respuesta: Ruth, eso fue hace más de 10 años... jajaja

- ¡¡Fuerza Illapu!! conciertos, varios conciertos en los que la garganta se acalambraba de tanto cantar. Y el recuerdo de aquella vez que entraste a conversar con ellos por primera vez, y yo te buscaba y no sabía donde estabas metida, y salió un hombre que se llamaba José Miguel y me dijo, ¿cuál es tu hermana? aaaa me dijo, ella está adentro con los otros del grupo, ¿¿quieres pasar?? y así yo también conocí a cada integrante de Illapu.

- La rusia y el flaco me pidieron que también los incorporara en estos recuerdos, y es que según ellos eras la mejor corredora de las mañanas. Y ellos estaban agradecidos por mantenerlos en línea y esbeltos con los trotes matutinos. Mijitaaaa (ese es el flaco), no se preocupe mijita que yo le ladro a los que la molesten...

- "Eres tú" , primer acorde de la canción ese viernes 16 de diciembre y veo en el fondo de la iglesia entrar a la misma que 15 minutos atrás no tenía peinado, no podía abrocharse el vestido... y venía tan linda, tan lista, como si todo lo anterior se hubiese ido y llevado los nervios penosos de un rato atrás. E innevitablemente una emoción me llena, emoción que hace que me ponga a llorar bajo los codazos de las otras cantantes del coro, ¿¿cómo estaba llorando en la primera canción, cuando todavía no partía el matrimonio??

- El viaje más triste al aeropuerto. Creo que hay tres idas al aeropuerto igualmente tristes, pero diferentes el uno del otro. El primero tal vez fue el más difícil, el momento triste luego de días tan alegres, pero a la vez tan esperado por ti y Oscar. Extraña mezcla de pena incontenible con la alegría de saber que al fin luego de años luchando contra la distancia llegaba el momento de no separarse más. Y al año siguiente la alegría de la sorpresa, pero también el momento del hasta pronto, donde tengo siempre en mi mente las palabras de mi cuñado: vamos a volver, no te preocupes que vamos a volver... ¿¿Y el tercero?? la tristeza de decirle nos vemos pronto a un niño que estaba en mis brazos cuando apenas cumplía 15 días... tristes despedidas que guardan el íntimo deseo de volver a verse pronto, y que con el paso de las semanas vuelven a la rutina que reconforta a través de una cámara web con audio.

- Mayeusis 2008 ... tú con 8 meses y medio de embarazo, yo corriendo para abrazarte luego de más de un año sin vernos... emoción, alegría, esperanza, y al fin poder sentir las patadas de ese niño que llegaría a revolucionar el departamento de torrecedeira. Lejos uno de los momentos más lindos que recuerdo contigo.

- Un Eloy: tu cara de alegría al salir de la sala de partos, y el niño con sus ojos abiertos mirando todo lo que pasaba. El papi y la mami todos chochos, y la cara de alegría (5 metros de sonrisa) del Oscar, fascinado por la experiencia de ser papá. Doy gracias a Dios haber podido estar junto a ustedes ese día, haciendo presencia a nombre de todos los tíos del Eloy porque fui la única que pude viajar a tan especial momento.

- Aaaaabaaaaaa, aaaaaaabaaaaaaa, aaaaaaabbbaaaaaa... momento de alegría, de risa, de chocheo máximo, jajajaja. Es la alegría y el hit del momento, tu risa hoy está en la risa de ese niño pillo, lleno de música y alegría como tú. De tu vientre creció una vida que nos llena en estos días, que hace que uno se olvide de lo que pasa. Abbaaaaaa, aaaaaaabbaaaaaaaa... el mejor momento del día de hoy.


Es mi modo de decirte hoy feliz cumpleaños, son las palabras para decirte que te amo, que en días como esto agradezco tu vida, el tenerte conmigo, el ser mi hermana con la que crecí, con la que peleé y con la que compartí casi toda mi infancia y adolescencia. Espero que este sí sea el último 24 de marzo que pasamos tan lejos físicamente, espero que pronto volvamos a abrazarnos y cantar, y reír, y hablar, y proyectar momentos juntas.

Y ahora me voy a dormir porque el sueño me la gana, y no tengo a nadie que me saque a bailar, así que no puedo decir que BAILANDO SE ME PASA...

domingo, marzo 07, 2010

A mi Chile querido

Una alegría extraña me cobija esta noche. Mi pueblo caído, herido y destrozado, ha sacado lo mejor que tiene: una solidaridad que supera cualquier expectativa.

Esa alegría de ver que Chile se levantará gracias a la unión de todos quienes vivimos en él, se mezcla con todas las imágenes que he ido guardando durante estos siete días.

Es fácil sonreír hoy luego de un día tan especial y emocionante. Bajo el manto de escombros, Chile ha dejado claro que no se dejará abatir por este embate de la natura. Chile se ha dado una mano y han juntado una cifra de dinero histórica para barrer el suelo agrietado y lleno de trozos de cuidades, y sobre ella volver a levantar sus casas, escuelas y hospitales.

Sin embargo no es fácil sacarse la pena profunda que te dejan las imágenes de muchas cuidades y pueblos caídos, destrozados, con personas que ya nunca volverán, que han quedado bajo la tierra o en el mar.

Mi cuidad está en el suelo. Toda mi vida se liga ahora a un lugar que casi no existe... Dios quiso salvar mi casa, que es algo que no todos pueden decir hoy, pero casi todas las calles que recorren mis recuerdos, están ahora bajo polvo.

Como no tener pena si cada día la realidad se hace más dura al enterarme de tantas familias conocidas que han quedado sin nada. Una realidad que angustia al querer ir al comprar algo al centro donde toda la vida estubo el comercio, y encontrarte sólo con escombros, porque todo, absolutamente todo está caído.

Tierra y mar agitados en una noche eterna, que han borrado mi litoral... aquel donde huía para escribir y sentirme más viva. Ese litoral que me regaló años de vacaciones familiares, encuentros con amigos, una noche de cantos bajo las estrellas y el sonido del mar cantando conmigo. Ahora se ha llevado el canto y las imágenes que sólo quedarán en la memoria de todos quienes lo conocimos antes de que todo sucumbiera.

Pero estoy aquí, viva... viva junto a toda mi gente amada, y este milagro de la vida es el sentimiento que intento gritarle a mi mente. En mi vida habrá un recuerdo antes y después de este terremoto, las imágenes de mi cuidad cambiarán, los cantos junto al mar serán diferentes pero volverán a teñirse de alegría porque si hoy estoy aquí es para seguir viviendo, no para morir lentamente.

Reconstruiremos nuestras cuidades, nuestras playas. Y cuando eso pase estos días serán una anécdota para contarle a las generaciones futuras, y dejarán de ser la pesadilla que por momentos parece.

Y voy a vivir para contarlo, y cuando lo cuente seré feliz de decir que la tierra nos movió pero no nos sepultó.
Aquí encontrarán parte de mi historia, parte de lo que soy, algo de lo que vivo día a día...