¡Al fin!
Cinco días enclaustrada en la pieza tratando de ordenar lo que consideraba inordenable. Un lugar lleno de cachureos acumulados durante años, ropa que guardaba pero que hace años no ocupaba, recuerdos recientes en medio de papeles inservibles y una cantidad de polvo que denotaban las tres semanas fuera de la casa. Panorama no muy alentador... pero el bicho del orden ya se había metido y me propuse no salir de ahí hasta que estuviese todo ordenado. Y como ese extraño bicho no me visita habitualemente, mejor atenderlo antes que se fuera.
Estuve a punto de desistir... por ahí por el día 3... parecía francamente imposible. Más cuando segía vaciando tarros y cajones lleno de hojas que alguna vez habían sido material de estudio, con cachureos que ya ni recordaba por que estaban tan secretamente guardados. Pero dentro de todo iban apareciendo cosas útiles que busqué en algún momento porque lo necesitaba pero nunca los encontré... así que ahora todo tenía que quedar clasificado.
Lo bueno de tantos días revisando y ordenando "mis cosas" es que resultó como un viaje a años anteriores, y sin dudas un encuentro con lo que soy. Dentro de todo muchas cosas resultaron ser basura, y ahí me di cuenta que en realidad nunca habían tenido mayor importancia, sin embargo otras cosas que guardaba de hace más de diez años seguían teniendo el valor que yo les había dado en esa época. Tantas cosas que uno no recuerda y que lo menos que provocan es una sonrisa, que difícilmente otra persona entendería... "tanta basura que guardas". Ahora se que todo lo que dejé no es basura sino el reflejo de mi personalidad actual, lo que fui y que me hace ser como soy ahora.
Nada de todo lo que encontré me avergonzaba, porque esa era yo, y la alegría más grande cuando finalemente terminé de ordenar y limpiar no fue el ver la pieza ordenada, sino el saber que pese a que pasan los años lo realmente importante sigue presente en mi, y cuando se me olvide quien soy tendré varias cajas (ahora ordenadas y clasificadas) para escarbar y reencontrarme con mi vida y mi verdadera esencia.
3 comentarios:
Clap, clap, clap...es traordinario. Se puede entrar, pasar, sacar algo sin que otras cosas se caigan, había una cama y un closet. Ahora que empieza el año de trabajo y estudio, de a poco los cuadernos, ropa, regalos se van a ir acumulando.. para que en el próximo verano otra vez ordenes.
Pero, repito mi felicitación por tan maratónica jornada.. clap, clap, clap.
Pochis po.
jojo que bien paula , se lo merecia esa pobre y antigua piecita que a albergado a grandes ..................( puede ser cantante,erregldor de televisores, plomero, soldador quimico ,inventor ,ponle lo que mas te guste jojojojo)personajes , como el tio manoloooooooooooooo gracias desde por aca tan lejos y por si acaso no aparecieron un par de medias del tio ,jajajjaaj besos tia
Hola primi!! Muy bueno lo del orden a años de desorden. Parece una cualidad típica de todos los Guerrero. Saludos pequeña!!
Marco Guerrero
Publicar un comentario